El último Presidente de la Unión Soviética e ideólogo de la Perestroika, Mikhail Gorbachev, ha advertido que “parece que el Mundo se prepara para la guerra”.
En una editorial publicada el pasado viernes en la revista Time, Gorbachev, que ganó el Premio Nobel de la Paz en 1990 por su papel en el fin de la Guerra Fría, opina que el mayor problema geopolítico al que nos enfrentamos es la militarización de la política y la nueva carrera armamentística.
Apunta que mientras presupuestos nacionales acatan criterios de austeridad en la inversión social, no escatiman en recursos a la hora de hacerse con armamento militar. Interpreta los recientes movimientos de la OTAN en Europa del Este, cercanos a la frontera rusa, como una amenaza para la seguridad global.
Critica también el estilo de liderazgo político global reinante, en su opinión beligerante y cada vez más cercano a doctrinas militaristas, algo que se ve agravado por una actitud acorde por parte de los medios de comunicación.
Ya en 2014 Gorbachev avisó de la llegada de una Nueva Guerra Fría, y advirtió de que la puerta a un mundo libre de armamento nuclear se está cerrando. Tomando como referencia su experiencia junto al Presidente Ronald Reagan, aboga por un esfuerzo conjunto de los Presidentes Trump y Putin para producir una resolución ante el Consejo de Seguridad de la ONU que limite el uso del armamento nuclear ya que, como él mismo teme, en una guerra nuclear no habría vencedores. [1]
Precisamente esta semana los científicos atómicos a cargo del simbólico Doomsday Clock (Reloj del Día del Juicio Final), movieron las agujas un poco más cerca de la medianoche, con la intención de avisar al mundo del peligro cada vez más real de un conflicto nuclear de consecuencias infinitamente devastadoras. [2]
[…] cada vez más cómoda en un marco de análisis estilo Nueva Guerra Fría, algo muy peligroso, como advirtiera recientemente Mikhail Gorbachev, pero inevitable, dado su enfoque neo-nacionalista. […]
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