La zona gris, una nueva concepción de conflicto bélico – Ni guerra, ni paz, ni todo lo contrario. Sirva de ejemplo la conducta de Estados Unidos a lo largo de 2016. Sin haber declarado la guerra a ninguno de estos 7 estados, las fuerzas armadas estadounidenses lanzaron al menos 26.172 bombas sobre ellos [1], según datos publicados por el Pentágono [2]. Excepto en los casos de Paquistán, Afganistán e Iraq, donde EEUU cuenta con el permiso del gobierno receptor para actuar militarmente, estos bombardeos violan flagrantemente la legislación internacional, ya que no han sido autorizados en votación por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, único órgano supranacional con la autoridad para aprobar la violación de la soberanía nacional de un estado.
Cabe destacar el caso de Siria, donde la coalición internacional de 63 países liderados por los Estados Unidos a través de la Fuerza de Misión Combinada (Combined Task Force) [3], ha lanzado más de 12.000 bombas sólo en los últimos 12 meses, desafiando la autoridad del Consejo de Seguridad al romper la normativa internacional. La coalición no incluye a las fuerzas armadas Rusas, Iraníes o Libanesas, también envueltas en el conflicto pero, a diferencia de los demás, invitados por el gobierno Sirio, y por lo tanto ateniéndose al principio de no-violación de la soberanía. Este último punto ha sido reconocido [4] incluso por el Secretario de Estado estadounidense John Kerry, en una grabación filtrada recientemente a los medios.